“No se le puede dar la mano, a quien permanece con el puño, cerrado”

Indira Gandhi

ANASTASIA

Anastasia quizás, quizá, ese sea su nombre, un día se apareció
Unos crisantemos blancos Anastasia en sus manos empuñó
En maga convertida con sendas fracturas en su rostro
Por los golpes recibidos en el “cuadrilátero” con campanas sin sonidos,
Enmarca ella, con unas prendas elegantes blancas su cuidada figura

Bombardeos la alcanzan desde las misóginas miradas
Como otredad me ven, responde la inteligente timonel,
A las víboras cuando les escucho murmurar, ignoro el decibel
Algunas partituras, si en “composiciones musicales” les doy lectura

Asertos en mi pensar si lo son, pero no son exactamente igual
De la heliosis por el sol, también la maga se protege.. su piel.
Camina con paso firme y, seguro entre el gentío calmada
No es hobby su magia, es experiencia, en sobriedad fogueada

Con las pequeñas chispas de un cerillo incendiaría
Y cuando del bosque le conminaran ella, les respondería
Los Lazarillos de los fastuosos “Palacios” se mudarán
De los que han estado “Ciegos” es la riqueza que reintegrarán

Con Luz, mi “Varita” y, una muy ardua tarea, la recuperación la verán
A nuevos patrimonios extranjeros seguridad les vamos a brindar
Y los gorriones itinerantes fuera de los bosques ahí volverán
Con la sonoridad de su trinar, los nidos vacíos de nuevo ocuparán
Disfrutarán de buenas y nuevas semillas y, nunca más ellos se irán