232
“Dios, Es la Vida, la Verdad y, la Eternidad. “Yo Soy” Su Hijo e, irradio Armonia
En su Sabio Templo Interior a Dios exclamando “Dale A tu Vida Valor”. No es tu Plan suplicaba el Ángel Guardián. Si no el del Altísimo para el devenir y, para tu propio Porvenir, Imagina el portento, respira, oyes, ves y, puede sonreír. Tú amor tan grande será que luego te costará sin él poder vivir. Hará aparición, una epidemia letal
¿Me oyes, madrecita? ¿Me oyes? Por el agua no te dejes llevar.
Pero las aguas bajaron por las laderas arrastrando tu cuerpo sin vida, las piedras y, los matorrales amortiguaron la irreverente saña del río; la promesa de Amor que no Viste cumplir…..te “obligo” a partir; sembrada, dormida y desabrigada quedaste junto a tu crio, y alzaste el Vuelo hacia el esplendido Sol “Encendido” Y no hubo llanto,
previous post